Puntos de Inflexión. (I)

Hola, me llamo Jesús, hijo de un párroco de pueblo y una Hermana Clarisa y no, no soy Católico. Ni siquiera Agnóstico. Soy un ateo de cojones. O un puto ateo, cómo dice mi tío. Prácticamente mi tío es mi padre. Mi tío y su mujer, o sea, mi tía. Tengo dieciocho años y me han recomendado que me busque la vida. La idea de volver al pueblo con mi padre no es muy buena. No quiero ser su sobrino mientras todo el mundo me sabe su hijo. Aunque en realidad está Ángela, una chica de pueblo, hermosísima, pero muy beata. No le he sacado más de un beso y eso la llena de morbo en mi cabeza. Tengo la impresión de que cuando voy soy el puto diablo. Siempre he sido el puto algo. Ya está, me haré la mochila y me iré a cualquier puto sitio.

(el Kartero)