Una barra de un bar. Apenas tres metros separan nuestras copas. Tres metros ocupados por tus otras vidas, por mis otras vidas y por un sinfín de miradas que se convierten en sospechas nada más son pensadas. Tres metros insalvables cuando los miedos te atan a un taburete.
(el Kartero)
No hay comentarios:
Publicar un comentario