Cuántos curriculums se pueden llegar a enviar? Cuántas veces puedo llegar a maldecir estas paredes que ni siquiera son las mías? Acaso tantas veces cómo las que pueda dejar que se me parta el corazón? Más veces de las que eche la culpa de mis miserias a lo que haya leído? Puedo soportar otra ocasión en la que no de la talla como amigo? Y seguir haciendo como que no me doy cuenta de que son ellos, mis amigos, los que pagan mis cuentas a escondidas? Puedo aguantar más tiempo sabiéndome inútil en cuanto a sacudirme la soledad que con demasiada frecuencia me acompaña? Continuaré siendo capaz de engañarme a mí mismo diciendo que el verano llegará y que entonces todo será distinto, mejor? Han sido muchas veces, demasiadas, y puede que esté preparado para una más. Tal vez para unas cuantas. Pero cada vez me siento menos dispuesto a seguir batiendo récords. Quisiera admirarme a mí mismo por otras razones, por auténticos hechos. Y el caso es que no encuentro siquiera el valor para cerrar durante unos pocos días. Así habrá que volver a hacerlo, aunque no tenga nada de heroico, otra vez más.
(Pinzón Azul)
No hay comentarios:
Publicar un comentario