miércoles, junio 28, 2006

Islotes

Esto es la historia de dos rocas que llevaban media vida contemplando el batir de las olas. Dejando que los cangrejos pulularan, contrariados, sobre ellas. Anteponiéndose a los destinos de los navíos. Dando agarre luego a sus náufragos. Mirándose, la una frente a la otra, viendo pasar el mar entre ambas, esperando la ola que las acercase. Lamentablemente esa ola no llegaba y las que si lo hacían era para desgastarlas poquito a poco hasta que un día, al amanecer, una ya no estaba, y por más que esperó la otra a que bajara la marea nunca volvió a verla. Cuan fácil hubiera sido rodar hasta ella mientras existía. Esta es la historia de esas dos rocas pero bien valdría para contar la de todas las demás.

(el Kartero)

1 comentario:

alejandrosl dijo...

Vaya, creo que conozco los nombres de esas rocas; pero para no herir susceptibilidades, seré una tumba...